En época de lluvias, uno repite la palabra uno. (Para Junio en Julio)

viernes, 3 de julio de 2009

Chales Marieta está enferma, enfermilla, onda dolor de garganta, cuerpo cortado, dolor de oídos y de cabeza, y todo porque ayer tremendo aguacero agarró al Doctor Bara Bara en una calle- de cuyo nombre prefiero no acordarme- calle que ni techito ni arbolito tapa gototas tenía y acabó empapado, empapadísimo pisando charcos y lagunas citadinas.

Chales, Marieta está enferma, onda calentura y mimos y caldo de pollo y música de los Beatles pa' que la salud regresé toda alegre al ritmo de Lucy in the sky...

Y en momentos así, cuando el Pepue está preocupadísimo por los exámenes finales, exámenes que por cierto hace por gusto y no por obligación; momentos en los que Verónica dice que otraaa vez se enojó con su ranchero; momentos en los que la Abuela Cari hace chocolate caliente para ver la nueva telenovela del dos con el de la mochila azul, el de ojitos dormilones; en momentos así, cuando la lluvia llega de nuevo, uno no puede dejar de notar que uno debería poner impermeabilizante en la azotea de su cabeza, para que las malas ideas y los sentimientos encontrados resbalen y todos queden felices y contentos; uno debería...pero no, llega junio y con junio las gotas y los rayos y la luz que se va.

Junio es el mes de la tristeza y las despedidas, junio tiene escaleras, junio tiene goteras, junio es un pulmón, uno que agoniza...