Marieta está triste, nostálgica, mirando un punto fijo, con un hueco en la panza, sin función de media noche; sin tenis en los pies; sin "jijiji; sin hola hola; sin el 2x1 en medicamentos genéricos; sin pase, acá está la mera mera onda de los medicamentos y de las ampollas.
Marieta no quiere salir a pasear, no quiere barbacoa, no quiere tacos al pastor, no quiere perseguir mariposas, no quiere bañar al Papiu; no quiere salir en la troca.
Marieta no quiere ir a trabajar, ni saludar a la señora de los jugos de naranja; ni perseguir chamacos que patean al Doctor Bara Bara; ni saber de arcones, ni de duranguense , ni del Cadaver de la Novia, ni del Atari; ni del señor de la esquina; ni de los sopes sin frijoles; ni de la magnesia, ni de las estatuas de la Alameda.
Hoy Marieta sólo piensa en llegar a su casa, meterse a la cama, taparse la cara con las cobijas; dejar que pasen las horas y que llegue la noche, y con la noche: Nada.
¿Por qué me pasa lo que me pasa cuando nada pasa?
Porque uno piensa que no existen y luego se los topa
jueves, 4 de septiembre de 2008
Publicado por MARIETA en 13:24
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
4 cuchicheos:
Ah, no doña Marieta, por muy apachurrada que ande, usted no puede dejar de bañar al Papiu y dejar de saludar a la señora de los jugos de naranja!!
Piense en la pájara Peggy, ella era bien chirolira y no se rajaba!
Nooo pos, pues cómo!!! Eso de no querer comer tacos al pastor sí que está grave.
Todos tenemos derecho a nuestros ratitos de tristeza, pero no deje que el ratito se alargue tanto.
Apapáchese muchote y espero que pronto la alegría se asome por una rendijita que le deje a la cobija.
pues, yo si apoyo la mocion de kedarse dormida esperando la noche. a veces nos hace falta.
saludos, y ke estes bien,
me gustó tu blog :)
pues ya que llegues a tu camita, puedes escuchar "la noche de un día difícil" de los beatles y seguro te sentirás mejor, tal vez hasta termines bailando. Ánimo.
Un abrazo.
Publicar un comentario